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Para Lectores

El Demoledor: La Película que Predijo Nuestro Presente

“El Demoledor” (Demolition Man) es una de las películas de acción más visionarias de los años 90 que, más allá de su aspecto de blockbuster, esconde una profunda crítica social y una sorprendente capacidad para anticipar aspectos de nuestra sociedad actual.

La trama nos sitúa en un conflicto entre dos épocas. Por un lado, John Spartan (Sylvester Stallone), un policía de los años 90 que resuelve todo con violencia y acción directa. Por otro, un futuro distópico aparentemente perfecto del año 2046 donde la sociedad ha eliminado todo tipo de conflicto, violencia y “placeres peligrosos” como el tabaco, la cafeína, el contacto físico e incluso los insultos.

Cuando Simon Phoenix (Wesley Snipes), un psicópata criminal, escapa de su prisión criogénica con habilidades mejoradas, las autoridades del futuro no saben cómo enfrentarlo. Su solución: descongelar a John Spartan, el único capaz de detenerlo. Esto provoca un choque cultural donde Spartan debe adaptarse a un mundo excesivamente controlado mientras descubre que la aparente utopía esconde una realidad mucho más oscura.

La película explora temas como el control social, la supresión de libertades en nombre de la seguridad, la resistencia contra sistemas opresivos, y cuestiona hasta qué punto estamos dispuestos a sacrificar nuestra humanidad por la estabilidad. A través de este enfrentamiento entre la brutalidad del pasado y la fragilidad del futuro, “El Demoledor” plantea una reflexión sobre el equilibrio necesario para una sociedad verdaderamente funcional.

Elementos Predictivos

La película mostró una visión sorprendentemente acertada de varios aspectos que hoy son realidad:

  • Tecnología de asistencia por voz: Los personajes controlan luces y dispositivos mediante comandos verbales, algo que hoy es cotidiano con Alexa, Google Assistant y Siri.
  • Vehículos autónomos: Los automóviles del futuro tienen piloto automático, tecnología que actualmente está en desarrollo avanzado.
  • Llamadas por video: La comunicación visual a distancia es normal en la película, como lo es hoy con Zoom, Teams o FaceTime.
  • Corrección política extrema: La película muestra una sociedad donde el lenguaje está estrictamente controlado y cualquier expresión ofensiva es multada automáticamente.
  • Realidad virtual: El sexo virtual sin contacto físico que muestra la película anticipa las tecnologías inmersivas actuales.
  • Control y vigilancia: Las cámaras y pantallas que todo lo monitorean reflejan nuestra actual sociedad de vigilancia constante.
  • Dominio de las grandes corporaciones: La película muestra un mundo donde solo una cadena de comida rápida (Taco Bell) sobrevivió a las “guerras de franquicias”, anticipando la concentración de poder corporativo.

Producción y Contexto

“El Demoledor” comenzó como un guion de acción convencional que evolucionó hacia una sátira social cuando Daniel Waters (guionista de “Heathers”) lo reescribió. Wesley Snipes no fue la primera opción para el villano, sino Jackie Chan, quien rechazó el papel para no dañar su imagen entre su público asiático.

El título de la película se inspiró en una canción de The Police, y el grupo grabó una nueva versión para la banda sonora. Aunque inicialmente la crítica la recibió con división de opiniones, con el tiempo se ha consolidado como un clásico de culto por su visión anticipatoria y su mezcla única de acción y crítica social.

Con un presupuesto entre 45 y 75 millones de dólares, la película recaudó 58 millones en Estados Unidos y 160 millones a nivel mundial. Su legado cultural va más allá de las cifras, convirtiéndose en un referente de cómo el cine de acción puede contener comentarios sociales relevantes y predicciones sorprendentemente acertadas.